LOS MENORES EXTRANJEROS LLEGADOS A CEUTA TRIPLICAN A LOS 519 REGISTRADOS EN ESPAÑA
El gran número de menores extranjeros llegados a Ceuta de manera irregular en la actual crisis con Marruecos triplica a los 519 registrados por el Gobierno de España desde el comienzo de año hasta el 15 de marzo de 2021 en todo el país, según ha recogido en una respuesta parlamentaria por escrito del Gobierno.
En su respuesta a VOX, con fecha del 10 de mayo, el Gobierno destaca: «Respecto a los datos solicitados, se indica que del número total de inmigrantes irregulares llegados desde el 1 de enero al 15 de marzo del presente año, 519 eran menores de edad, si bien los datos pueden sufrir variación cuando las plantillas confirmen los mismos», datos de una semana antes de la crisis de Ceuta con la llegada masiva de 8.000 inmigrantes.
Según los datos de la Delegación del Gobierno ceutí, entre los 8.000 inmigrantes hay unos 1.500 menores que se distribuyen de esta forma: más de 800 están acogidos en dos módulos y otros 792 están ya reseñados en equipamientos de acogidas. A esta cifra habría que añadir aquellos que no han sido localizados, así como los 200 menores ya tutelados antes de la crisis, y que se van a repartir entre diferentes comunidades autónomas.
El Gobierno indicaba que «el número total de repatriados en el año 2020 fueron de 3.738«. Respecto a los expedientes de expulsión ejecutados durante el período comprendido entre el 1 de enero y el 31 de marzo de 2021, añadía que fueron 516.
«Para el Ministerio del Interior es prioritaria la protección de los menores y sus derechos, y más si están en situación de vulnerabilidad, como es el caso de los menores extranjeros no acompañados», subraya el Ejecutivo.
SIN PRUEBAS SOBRE EFECTO LLAMADA
En esta línea, el gobierno defiende las gestiones «políticas, administrativas y operativas» del Ministerio del Interior para retomar el retorno de inmigrantes previo a la crisis de la pandemia de Covid-19 y rebate la visión de Vox sobre la política migratoria: «no hay demostración ni evidencia alguna de que exista un efecto llamada«.
«La presión migratoria sobre los países de la Unión Europea se debe fundamentalmente a la diferencia de niveles de renta y de vida, desigualdades socioeconómicas que se están incrementando en la actual situación de pandemia».
El objetivo, dice, es impulsar «otras fórmulas de cooperación que den respuesta a la necesidad de creación de unidades centrales de fronteras o de inteligencia allí donde pueda ser necesario».