Se pone en marcha una campaña para prevenir el consumo de cannabis entre los menores
La Consejería de Sanidad de la Comunidad de Madrid, a través de la Dirección General de Salud Pública, ha puesto en marcha una campaña de prevención de consumo de cannabis dirigida, en una primera fase, a los menores de 12 a 16 años, que se inicia hoy martes con el visionado simultáneo de un vídeo de animación en las clases de 1º a 4º de la ESO de la región.
La actividad con carácter voluntario y respetando la autonomía de centros, se lleva a cabo en colaboración con la Consejería de Educación y coincidiendo hoy con la celebración del Día Universal de la Infancia. La campaña, incluye, además del vídeo (disponible en Canal Youtube de la Consejería de Sanidad), materiales de apoyo tanto para el profesorado como para el alumnado, y estarán disponibles a lo largo del día de hoy en la página web de la Comunidad de Madrid.
Esta iniciativa forma parte de la ‘Estrategia de Prevención de Adicciones’ que desarrolla la Comunidad de Madrid y se centra en prevenir el consumo de cannabis, alertar de los riesgos asociados a la salud y aumentar la percepción social sobre el riesgo que conlleva el consumo de esta sustancia, especialmente entre los menores. Otros grupos de edad se irán abordando con posterioridad de manera paulatina, especialmente el grupo de 17 a 25 años.
En la Comunidad de Madrid el cannabis es la droga ilegal más consumida, y la que los jóvenes consideran más fácil adquirir. El 31,5 % de los estudiantes entre 14 y 15 años de la Comunidad de Madrid ha consumido esta sustancia en alguna ocasión, el 26,7 % en el último año y el 18 % en el últimos mes, valores que están por debajo de la media nacional.
El inicio temprano en el consumo de cannabis está relacionado con un mayor riesgo de desarrollar dependencia, alteraciones cognitivas y trastornos psiquiátricos, en especial esquizofrenia. La Dirección General de Salud Pública insiste en que el consumo de dosis altas de cannabis en la adolescencia “puede producir una reacción psicótica aguda, que incluye alucinaciones, delirio y una pérdida del sentido de la identidad personal o auto reconocimiento”.
El consumo de cannabis se asocia con una gran cantidad de situaciones de riesgo. Así el 17 % de los alumnos que habían sufrido un accidente de tráfico como conductor del vehículo habían consumido cannabis en las dos horas previas, y 14 % de estudiantes se había visto implicados en peleas tras tomar la sustancia. Los estudiantes que consumen cannabis presentan un peor rendimiento académico, mayor frecuencia de discusiones familiares, mayor número de relaciones sexuales sin preservativo y una mayor prevalencia de posible adicción a internet.
En el año 2016 se trataron por abuso o dependencia de cannabis a 3.048 personas, el 82 % de los pacientes eran hombres y el 84% habían iniciado el consumo antes de los 18 años. También, es destacable que el 30 % de las urgencias hospitalarias de la región por consumo de drogas fueron provocadas por el cannabis.