La Oficina Antifraude detecta un posible conflicto de intereses en el contrato de «Madrid Destino»
La Oficina Antifraude del Ayuntamiento de Madrid ha observado en un informe fechado ayer un «posible conflicto de intereses» en la contratación en el seno de Madrid Destino de Jara Fernández, hija del actual consejero delegado de la empresa pública, Antonio Joaquín Fernández Segura
El dictamen ha sido propiciado por una denuncia del grupo municipal de Ciudadanos, cuya portavoz, Begoña Villacís, ha celebrado hoy que la Oficina Antifraude haya suscrito la tesis de su partido, es decir, que esa contratación se hizo sin «transparencia» ni «objetividad».
La hija del consejero delegado de Madrid Destino obtuvo una plaza como técnico de programación de festivales y de cine de ficción en la entidad tras ganar un concurso público este verano. Jara Fernández obtuvo esta plaza en una prueba a la que optaron 139 personas, de las cuales 11 tenían los requisitos mínimos exigibles de tener 24 meses de experiencia como programadora y escribir en una revista especializada.
Fernández ya trabajaba en Madrid Destino como programadora de Cineteca desde febrero de 2017, dos meses antes de que su padre se incorporase como consejero delegado, un fichaje que realizó Carmena al asumir el área de Cultura y Deportes. Dado que fue Antonio Joaquín Fernández quien firmó la memoria justificativa de la necesidad de contratar personal para el puesto en cuestión, la Oficina Antifraude estima que hubo «un posible conflicto de intereses en quien determina los requisitos que deben reunir los candidatos, cuando se presume que conocía que uno de los aspirantes a dicha plaza era su hija».
Y continúa: «Igualmente sería posible detectar, por las circunstancias expuestas, que concurría una causa de abstención (del procedimiento de contratación) en la persona del consejero delegado». Villacís ha apuntado que este caso ha sido «una buena manera de testar» este organismo impulsado por el Gobierno municipal de Manuela Carmena, a la que ha exigido que «explique verdaderamente qué opina al respecto».
La edil ha recordado que, cuando se planteó el asunto a Carmena tanto en comisiones como en el Pleno, ella hizo «su técnica de humo, ya clásica en la alcaldesa», y cree que ahora le toca «mojarse». «Si yo fuera la alcaldesa daría la cara», ha dicho Villacís, que ha agregado que el informe de la Oficina Antifraude se trasladará a la Inspección General de Servicios del Ayuntamiento para que adopte las medidas oportunas.