Hoy enjuician a las dos activistas de Femen que se desnudaron en La Almudena
La Fiscalía pide nueve meses de prisión para cada una por un delito contra los sentimientos religiosos porque actuaron «con ánimo de ofender a los feligreses» y faltaron «al respeto debido a un lugar de culto», mientras que la acusación particular que ejerce la Asociación Española de Abogados Cristianos, eleva su petición hasta los dos años de cárcel y 46 meses de multa.
La defensa reclama la libre absolución de las acusadas al manifestar que «el ánimo que movió su acción obviamente no era la ofensa religiosa sino el fomento del debate social» sobre la reforma de la Ley del Aborto «realizado en un lugar de evidente simbología». Y lo hicieron, según señala su abogado Endika Zulueta, «con formas ya utilizadas por antiguos movimientos feministas -utilizando el cuerpo como vehículo para su mensaje- consiguiendo así su repercusión internacional».
Según el relato de la Fiscalía, las activistas entraron en la catedral acompañadas por otras personas no identificadas, se dirigieron al altar mayor, se desnudaron de cintura para arriba y se encadenaron al crucifijo y permanecieron allí hasta que los policías acudieron y cortaron la cadena con una cizalla.
En sus torsos se leían expresiones como «altar para abortar», «Gallardón inquisidor», «aborto ilegal» o «tomemos el altar», según el escrito de la Fiscalía. Se trata de la tercera ocasión en que se juzga a activistas de Femen en España. La primera fue en 2006 cuando cinco jóvenes fueron absueltas por haber irrumpido semidesnudas en una marcha antiabortista en Madrid en noviembre de 2013.
Y la segunda en octubre de 2017 cuando una chica aceptó una condena a un año de prisión por atentado contra el exministro del Interior, Jorge Fernández Díaz, el 23 de abril de 2015 en un acto en Madrid en el que, como protesta contra la llamada «Ley Mordaza», le arrojó un ejemplar de la Constitución española.