Hallan el cadáver de un hombre en el foso de un ascensor de La Paz
Empleados de mantenimiento y de seguridad del Hospital de La Paz hallaron en el día de ayer, martes 10 de julio, el cadáver de un hombre de entre 50 y 60 años en el foso de un ascensor del centro. El cuerpo sin vida fue encontrado a primera hora de la mañana, después de que los trabajadores advirtiesen del hedor que desprendía. El Grupo V de Homicidios de la Policía Nacional se hizo cargo de la investigación en un primer momento, pero el caso ha sido derivado a la Comisaría de Fuencarral. Aunque trabajan en varias hipótesis, desde la prudencia, se sospecha que la muerte del individuo se debiese a un suicidio o a un accidente.
La noche del lunes, 9 de julio, se recibió un aviso por ruido en el ascensor, por lo que se procedió a su parada. Los operarios accedieron a la cabina al día siguiente para comprobar el el correcto funcionamiento del elevador. Fue entonces cuando, alarmados por el fuerte olor, analizaron el foso del montacargas y hallaron el cadáver. Instantes después, se dio el aviso a las autoridades. El finado se encontraba boca arriba y presentaba varios traumatismos a causa de la caída. Desde el Hospital de La Paz han informado que el individuo no era trabajador del centro.
Las autoridades tratan ahora de identificar al hombre, que no portaba documentación que permitiese su reconocimiento, y su filiación. Se prevé que la autopsia del cadáver se practique en el día de hoy, permitiendo a Homicidios avanzar en la investigación y averiguar más datos sobre los hechos que produjeron la muerte del hombre. Frente a lo que se había barajado en un principio, el cuerpo no portaba ninguna nota manuscrita.
Desde la Comisaría de Fuencarral se han iniciado las pesquisas pertinentes: por el momento se confirma que el ascensor funcionaba correctamente y que el mismo no estaba forzado; asimismo, no se hallaron señales que pudiesen indicar que se produjese una muerte violenta del hombre, aunque las autoridades aclaran que todas las líneas de investigación permanecen abiertas. Algunas informaciones detallan que el individuo disponía de una llave maestra.