EL FISCAL TRASLADA AL JUEZ DEL CASO DE LAS MASCARILLAS SU NEGATIVA A ENTREGAR EL INFORME DEL SEPBLAC AL SER CONFIDENCIAL
El fiscal anticorrupción ha trasladado al juez Adolfo Carretero su negativa a entregar el informe del Servicio de Prevención del Blanqueo de Capitales del Banco de España (Sepblac) que propició la investigación del caso de las mascarillas al no tener valor probatorio y tratarse de un informe confidencial, han confirmado a Europa Press fuentes fiscales
Así consta en un escrito en el que la Fiscalía se pronuncia tras la petición del magistrado a instancias de una solicitud de la acusación popular en nombre de Más Madrid, que reclamó incorporar el informe al sumario para que el resto de acusaciones lo conocieran.
El fiscal se escuda en el artículo 46 de la Ley de Prevención de Blanqueo de Capitales que establece que la información y documentación de que disponga el Servicio Ejecutivo de la Comisión y los informes de inteligencia financiera tendrán «carácter confidencial, debiendo guardar reserva sobre los mismos toda autoridad o funcionario que acceda a su contenido».
«En particular, no será en ningún caso objeto de revelación la identidad de los analistas que hayan intervenido en la elaboración de los informes de inteligencia financiera ni la de los empleados, directivos o agentes que hubieran comunicado la existencia de indicios a los órganos de control interno del sujeto obligado», recoge dicho artículo.
Agrega que «los informes de inteligencia financiera no tendrán valor probatorio y no podrán ser incorporados directamente a las diligencias judiciales o administrativas».
Fuentes fiscales apuntan a Europa Press que el citado documento cuenta con información bancaria que ya está incorporada en la causa e insisten en que estos informes «no pueden incorporarse directamente a los procedimientos», ya que «no tienen valor probatorio por sí mismos»
En el sumario consta que fueron las entidades bancarias empleadas por los comisionistas quienes dieron la voz de alarma al detectar el ingreso por parte de Luis Medina y Alberto Luceño de elevadas sumas de dinero con justificaciones sospechosas.
En el caso del hijo menor de Naty Abascal el ingreso era de un millón de euros mientras que su socio elevó a 5 millones la cantidad ingresada en sus cuentas bancarias.
Fue entonces cuando los bancos avisaron al servicio de prevención de blanqueo de capitales y éste alertó a la Fiscalía Anticorrupción, que abrió una investigación en noviembre de 2020.